Últimos artículos
Listado de artículos
Monday, 21 November 2022 10:49
Content with tag
danzaterapia
Remove
.
![](/documents/1565578/0/expertoanaluz-820x390.jpg/32320212-d58e-64fe-0122-6e4fbccbb4b8)
Palabra de experto: «Ana Luz de Andrés Terán»
Categorías: Divulgación
Etiquetas: dct , danzaterapia , experto , conferencia , seminario
RECUERDO EN MOVIMIENTO CRE DE ALZHEIMER | SERVICIOS DE REFERENCIA Vídeo del seminario impartido por la danzaterapeuta Ana Luz de Andrés Terán sobre «Recuerdo en movimiento», en la que se difundieron a conocer las bases teóricas y prácticas de la Danza Creativa Terapéutica para enfermedad de Alzheimer y otras demencias.
Monday, 07 November 2022 08:17
![Pareja de ancianos bailando](/documents/1565578/0/dct-820x390.jpg/55b6b8eb-ffa6-c19b-acd4-bbd396c9476a)
La lírica del cuerpo
Categorías: Divulgación
Etiquetas: memoria , terapia , dct , movimiento , danza , danzaterapia , baile
ANA LUZ DE ANDRÉS TERÁN | DANZATERAPEUTA El cuerpo es como una casa que habitamos, que nos contiene y que poblamos a la vez. Es un espacio expresivo. Nuestro espacio, nuestro medio general de poseer un mundo. Valorar el mínimo gesto es vivir el propio cuerpo, buscar los ecos que se despiertan en él y las prácticas corporales no son más que una guarida donde mantener vivo lo vivo. Optar por la danza implica elegir el cuerpo como lugar de relación con el mundo, como instrumento de conocimiento, de expresión y de pensamiento. Antes de la aparición de la danza contemporánea o danza moderna, el cuerpo para el baile, estaba determinado y estructurado. El torso era algo rígido e inexpresivo, las extremidades eran los privilegiados y casi únicos elementos de la expresión. En cambio el cuerpo contemporáneo da rienda suelta a las zonas corporales que no controlan el discurso. Vientre, tórax, nuca o espalda inician el movimiento de forma que las extremidades cambian su lenguaje. Por ejemplo, la cabeza ya no tiene una función exclusivamente expresiva, se abandona al movimiento del todo o se aísla colgando del cuello. A partir de principios del siglo XX se empieza a entender el cuerpo como un cuerpo pensante y productor de sentido. Es un inmenso abanico de tonalidades y poética, Laban lo denomina la “firma corporal”, existen infinitos cuerpos cada uno con una melodía diferente. El diálogo más importante que se produce en las sesiones de Danza Creativa Terapéutica es el que se produce entre el danzante y su cuerpo. La percepción de sí mismo a través del movimiento produce sensaciones, emociones que favorecen el reencuentro con el self. Se hace presente un cuerpo con historia que hace posible la reconciliación entre memoria y olvido. Frente a una persona con demencia nos encontramos con una mente transitoria, sin raíces, acompañada de un cuerpo lleno de saberes que recuerda su dimensión existencial y reclama su lugar en el espacio-tiempo. Los participantes de las sesiones se comunican, independientemente de sus afasias y capacidades cognitivas, gracias a que su movimiento circula fuera de las fronteras verbales de la racionalidad. Como dice Louppe (2011), “El cuerpo tiene su propio lenguaje que el lenguaje no conoce”, (p.55). El cuerpo será entonces un discurso que se construye en un tiempo propio y relata la historia del sujeto. Construimos un escenario de recuerdos desmemoriados y vivimos el cuerpo como una experiencia del movimiento, el espacio y el tiempo. El bailarín desmemoriado crea una danza despojada, sin intenciones conscientes arraigada en las más profundas tradiciones que le enraízan a la realidad y al otro. Bibliografía Louppe, L. (2010). Poética de la danza contemporánea. Salamanca (España): Universidad de Salamanca.
Monday, 07 November 2022 10:59
![El espacio vacío](/documents/1565578/0/espaciovacio-820x390.jpg/f4f607dc-2854-064a-691d-98e1fef6b2c8)
El espacio vacío
Categorías: Opinión
Etiquetas: tnfs , danza , danzaterapia
ANA LUZ DE ANDRÉS TERÁN DANZATERAPEUTA DEL CRE DE ALZHEIMER Las mentes son espacios. Los espacios se ocupan. Los espacios son memoria. Ocupar el espacio es ocupar el presente, el pasado y el futuro. Parece una evidencia, pero para el paciente no hay muchas evidencias. Para un cuerpo sin memoria todo es nuevo y lo nuevo, como diferente, siempre es difícil, a veces, incluso terrorífico. En un cuerpo sin memoria el espacio vacío debe ser un abismo, pues ese presente ni siquiera le ofrece referencia alguna a la que agarrarse para empezar a construir su yo. Un yo que parte de la desmemoria. Los espacios nuevos son admirados con sorpresa. En los espacios vacíos caben todas las formas. Dejemos a un niño en un espacio vacío y veremos cómo se asusta, pero poco a poco irá situándose en el espacio. Cada forma que el cuerpo adopta es una emoción nueva. En el paciente, hacerle reconocer un movimiento nuevo en el espacio es una conmoción. Un simple movimiento puede resultar algo nuevo para el paciente y, como nuevo, emocionante y creativo. Existe como una memoria escondida que provoca esa emoción, una anagnórisis, un reconocimiento no consciente. Los humanos nos alegramos cuando algo nos es familiar, es como decir: eso lo conozco yo, eso es parte de mí, forma parte de mi bagaje, y sin embargo, aún siendo conocido, parece nuevo y parece nuestro, creado por nosotros. Quizá la emoción del paciente venga provocada por esos dos aspectos, lo nuevo y aquello que inconscientemente es conocido, la sinergia de ambos dan un resultado diferente, un acto creativo. En los humanos sin demencias, la creación no existe sin memoria. Muchos artistas consideran que su principal fuente de inspiración es la memoria. Se empeñan en recordar episodios o imágenes de sus vidas para posteriormente plasmar esa emoción en sus obras. Nadie nace de generación espontánea, todos somos hijos de alguien. Nuestro padrino es la memoria. Sin referencias no hay creación. Otra cosa es el descubrimiento. Descubrir espacios nuevos provoca emoción, pero no es un hecho creativo. Sin embargo, la consciencia del en el espacio, sí puede serlo. El espacio por sí solo, solo es espacio. Es un agujero negro; pero en cuanto se es consciente que el cuerpo forma parte de él, ya comienza a construirse un mundo. Y de eso trata la creación, de construir mundos habitados, pero nuevos. En algunos estados de algunos pacientes todo lo que ven en su presente es novedoso y produce emociones, pero, cuando aparece el reconocimiento surge la alegría. Si añadimos al cuerpo y al espacio materiales, el mundo que se está habitando y construyendo comienza enriquecerse. En trabajos terapéuticos con pacientes se ha observado cómo gustan de jugar con materiales con organicidad potente. Podríamos hablar de ejercicios con plásticos grandes y finos que muestran su levedad y su elegante caída. Los pacientes como los niños, o como cualquier ser sin demencia reconocida, son proclives al juego con estos elementos . Manipularlos es un gozo. El manipulador paciente se enamora de su material, lo hace volar, disfruta con su caída y parece sentirse el creador que da vida a eso que tiene entre las manos. Si el paciente observa desde fuera, si ven manipular a otro, sienten la necesidad de robárselo para jugar con él. Lo cual vuelve a resultar un reconocimiento pero más amplio. Ahora junto al material y al espacio aparecen el otro y el yo observador. A nosotros quizá nos parezca poco , pero para el paciente es algo muy emocionante que produce una reacción en él. Así que debemos sumar un elemento más a ese pequeño hecho creativo: la interacción. No está demostrado que estos pequeños ejercicios mejoren la salud del paciente globalmente, pero, al menos, en ese presente, el paciente es un ser activo. Algo no baladí, si consideramos que nuestra vida está compuesta por millones de minúsculos presentes que, los no diagnosticados como enfermos, despreciamos, pero que para un paciente de alzheimer y sobre todo para su terapeuta son hechos muy relevantes. Otro de los componentes del hecho creativo es el juego. Se podría considerar al ser humano como un homus ludens. ¿Y qué es el juego en su esencia? En primer lugar, algo que produce tensión, placer, enojo… en definitiva algo que emociona. Quizá el juego comience a construirse por un pequeño gesto que provoca placer. ( lanzar un plástico al aire y observar su caída) Si el paciente repite este gesto varias veces, el juego comienza a tener unas reglas ( Para que el plástico caiga levemente hay que lanzarlo al aire) A lo mejor, después, el paciente, sin querer o conscientemente se coloca debajo del plástico cuando éste cae y se ve envuelto como por una cúpula de plástico, lo cual, le causa otro pequeño placer, que añade a su primer gesto. Ya tenemos dos movimientos, dos reglas del juego que el paciente repite y a esto seguramente se le vayan añadiendo movimientos nuevos. El sujeto está creando un juego con unas reglas que le van provocando nuevas emociones. Así se construyen los mundos, con improvisaciones que dan lugar a leyes, a reglas enfocadas en estos casos a conseguir quizá placer o la emoción que sea, pero que convierten al paciente en sujeto de la oración, en el que realiza la acción y, aunque él no sea consciente de tal hecho, lo siente y, por tanto, se siente vivo y activo. De una manera u otra el ser humano es un ser creativo en su esencia y nuestra tarea como terapeutas es ésa: devolver al paciente, aunque sea en minúsculos presentes, a su condición humana.
Friday, 04 November 2022 15:57
El objeto transicional y la demencia
Categorías: Divulgación
Etiquetas: demencia , danzaterapia , objeto transicional
SERVICIOS DE REFERENCIA 19 MAR 2014 El objeto transicional -inicialmente definido por D. W. Winicott en 1951 en su artículo «Transitional objects and transicional phenomena» (1)- se entiende como un objeto material del entorno, por lo general blando, que el bebé elige y usa dentro del área intermedia de experiencia. Según este concepto el ser humano tiene la posibilidad de transitar desde la dependencia absoluta del medio ambiente a una independencia relativa, y como parte de este paso se encuentra el objeto transicional (2). En este objeto, el infante deposita un apego, vuelca las ansiedades, frustraciones, miedos y funge como un objeto que suple ciertas funciones de la madre cuando está ausente. El concepto de objeto transicional está relacionado con dos conceptos importantes: el de «madre suficientemente buena» la cual permite la adaptación al mundo externo del infante, acoge sus gestos espontáneos, interpreta sus necesidades y las devuelve como gratificación, y el concepto «espacio transicional», un espacio intermedio que, no es ni el espacio exterior objetivo, ni el espacio interno subjetivo del niño, sino un tercer espacio de inter-sección ocupado por los «objetos transicionales» (2). Tomando como base esta teoría de D. Winicott y adaptándolo a la necesidad de intervención terapéutica en la ansiedad por separación en las demencias- un equipo de investigación del CRE de Alzheimer, formado por la danzaterapeuta Ana Luz de Andrés Terán, el psiquiatra Benjamín Cortés Morales, y la psicóloga Elena González Ingelmo, diseñó un proyecto piloto con una paciente con enfermedad de Alzheimer de 84 años (GDS: 5, MMSE: 14/30, MEC: 14/35, Índice de Barthel: 50, Escala de Lawton y Brody 0/8), la cual presentaba una gran ansiedad aguda que se producía en los momentos de despedida en mayoría de los encuentros con su hija. El objetivo de este proyecto piloto fue disminuir la ansiedad de separación mediante el trabajo con el objeto y la función de la madre suficientemente protectora, representada por la terapeuta, durante las visita de su hija. Para llevar a cabo el estudio con esta única persona se hicieron ocho sesiones de una hora con la paciente, todos los martes de cada semana ininterrumpidamente y a la misma hora a lo largo de dos meses. Un velo de color verde fue el Objeto Transicional Adulto, presentado a la paciente en la primera sesión terapéutica. A diferencia de la teoría de D. Winnicott, el objeto fue elegido por la terapeuta, aunque el color fue elegido por la paciente. Se eligió el velo porque a la vez que permite jugar con él, cambia las cualidades y calidades del movimiento, es un objeto de uso cotidiano en el adulto mayor y no es un juguete infantil. Además, permite interactuar con otra persona, es fácil de transportar y de guardar en su habitación para que luego pudiera reconocerlo como suyo. El método de trabajo fue el juego como lo sugiere D. Winicott (2), a través de las teorías de la danza movimiento terapia (3). Todas las sesiones se iniciaron en la habitación de la paciente, la cual recogía y llevaba el velo a la sala de terapia, que representó el espacio transicional intrapsíquico. En la sala se desarrollaron juegos con el objeto como «enrollarse y desenrollarse», «el escondite», «volar», «tirar y empujar». La sesión finalizaba doblando el velo y llevándolo ella misma a su habitación. Se realizaron tres entrevistas y una sesión con la hija. En la primera, se le expuso el proyecto y se le pidió su consentimiento para participar. En la siguiente se le traspasó el objeto a la hija para su utilización posterior en visitas sucesivas. La última entrevista fue de seguimiento. Resultados Se dio el proceso de apropiarse del objeto y de reconocerlo como suyo, ya que ella lo tenía guardado en su habitación y sabía perfectamente dónde estaba, se pasó de que la terapeuta llevara el objeto a que ella lo buscara en su habitación, lo llevara a la sala de juego, y que al terminar la sesión ella misma lo doblara y guardara en su habitación. La sala de terapia cumplió las funciones del espacio transicional, la terapeuta cumplió el papel de la madre suficientemente buena y se observó un cambio en la cualidad y calidad del movimiento, ya que la paciente solía rechazar el contacto físico y con el velo ella cruza el espacio para solicitarlo. También se percibió un cambio en el lenguaje, de las ecolalias persistentes a la generación espontánea de frases relacionadas con el juego. El traspaso del objeto en la relación madre hija presentó menos dificultades de las previstas. Durante el proceso la relación entre ellas se modificó de tal forma que jugaron desde el principio y fue la paciente la que dirigió el juego. La hija no mostró la vergüenza que este juego le podría producir con su madre, sino que se involucró rompiendo las pautas rígidas de relación. El juego finalizó cuando la paciente lo decidió, dobló con su hija el pañuelo, regresaron juntas a la habitación y se observó una despedida afectuosa y sin angustia. Su hija manifestó que se sentía más tranquila al usar el objeto, por lo que este resultó también válido para reducir la ansiedad en la hija. Durante su permanencia en el centro, tanto el objeto, el espacio y la nueva rutina relacional-lúdica establecida siguieron funcionando como se había previsto. Después del alta, la paciente fue ingresada en otro centro residencial y aunque se intentó utilizar el objeto nuevamente no se observaron los mismos efectos. Esto pudo haber ocurrido debido a que el cambio de «espacio donde se realizaba el juego», «tiempos de visita», «la adaptación al nuevo sitio» y otras variables no conocidas afectaran la utilidad del objeto, ya sea por cambio en el significado del objeto (que deja de ser el objeto transicional) o porque para implantar la nueva intervención se necesite más tiempo. La principal conclusión del estudio es que se logró disminuir la ansiedad que producía la separación mediante el uso lúdico y adulto del objeto, tanto en los encuentros con la terapeuta como con la hija, objetivándose en la menor necesidad de intervenciones farmacológicas en los momentos de despedida de su hija y familiares. (1) Winnicott DW. Transitional object and transitional phenomena. In: Collected Papers: Through Pediatrics to Psy-choanalysis. New York, NY: Basic Books, 1951;229-234. (2) Winicott DW. Realidad y Juego. Barcelona: Gedisa; 1982. (3) Wengrower H, Chaiklin S. La Vida es Danza: El arte y la ciencia de la Danza Movimiento Terapia. Barcelona: Edi-torial Gedisa; 2008.
Tuesday, 15 November 2022 10:36
La danza, la creatividad y la terapia: de la idea a la realidad
Categorías: Divulgación
Etiquetas: danzaterapia , afacayle , biodanza , creatividad
FEDERACIÓN DE ASOCIACIONES DE FAMILIARES DE ENFERMOS DE ALZHEIMER DE CASTILLA Y LEÓN ESTHER DUQUE 18 FEB 2014 El movimiento del cuerpo es algo más que algo rutinario. La forma de manejar las manos, subir y bajar los brazos y poner un pie delante de otro puede considerarse como algo adquirido, que de forma inconsciente hace nuestro cerebro cuando lo ordenamos. ¿Pero hay algo más del movimiento? Las sensaciones, las emociones… Todo lo que reside en la memoria, todo lo que lleva al baile. Por ello, la biodanza ha sido empleada como elemento estimulador para los enfermos de alzhéimer. Con el fin de que, el momento en el que se olviden de lo aprendido cuando eran niños, como caminar, no llegue nunca, o lo haga más tarde. La Federación de Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzheimer de Castilla y León se ha servido de esta técnica para llevar hasta 27 agrupaciones de toda la región una nueva perspectiva sobre los tratamientos. Tras el éxito del programa realizado el año anterior de risoterapia, en esta ocasión el baile ha sido el elemento empleado como terapia en enfermos, cuidadores, voluntarios y profesionales para estimular «la vitalidad, la creatividad y la afectividad, entre otras capacidades», como explicaba María Fraile, especialista en terapias alternativas, que ha llevado hasta 27 puntos de la región este programa financiado por la Fundación La Caixa, la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León y Afacayle. «Hemos tratado de eliminar los límites; porque éstos los ponemos nosotros mismos, y si conseguimos sacarlos fuera llegaremos mucho más lejos», añadía María. El programa, denominado ‘Vive el baile’ se ha llevado a cabo en sesiones de dos horas y media de duración en cada asociación, que se han segmentado en dos partes: una primera de formación para los profesionales y otra de práctica con el resto de los miembros de Afacayle, incluidos los enfermos. Hay que tener en cuenta que la Federación atiende, a través de los AFAS, a 2.532 enfermos, y que cuenta, dentro del volumen asociativo, con 22.667 castellano y leoneses, de los cuales 507 son trabajadores. Para Cristina Garrido, técnico, educadora social, coordinadora del grupo de tarde del Centro de Día de Valladolid de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y alumna de biodanza «esta es una de las mejores experiencias que hemos tenido. Para mi ha sido muy importante la buena exposición teórica, porque hemos comprendido la danza y la actividad como algo más que algo lúdico. Está pensada con unos criterios, tiene unos objetivos, fines y resultados muy claros. Esto no es una fiesta, aunque también lo sea». A esto añadía que «normalmente, con el día a día, tenemos una visión de túnel del enfermo. Creemos que sabemos lo que necesita y se lo damos. Pero el realizar acciones atípicas como ésta nos abre la perspectiva de la persona a la que estamos tratando y nos ayuda a ofrecerle un mejor y adaptado servicio. Hay que tener en cuenta que cada enfermo de alzhéimer es único, no hay dos casos iguales». Tras la teoría, los «estudiantes» participaron en una parte práctica. A nivel emocional se crearon momentos de desinhibición y de libertad plena, eliminando los problemas del día a día. La parte práctica tuvo un recorrido estructurado basado en fases. Al comienzo, una presentación de los participantes y de la iniciativa, para pasar a la motivación y a tratar de eliminar los convencionalismos y a dejar llevarse por el cuerpo y la mente, para continuar con el trabajo del ritmo y la coordinación, fomentar la confianza con el resto del grupo y acabar con la relajación. «Es muy difícil hacer que se sientan las emociones a nivel corporal. Es necesario cambiar el chip. Por esto no hemos realizado coreografías, ni es baile propiamente dicho, sino otra forma de expresar los sentimientos utilizando nuestro cuerpo», puntualizaba la encargada de realizar la terapia. «Salimos con un subidón de la clase indescriptible, todos teníamos las emociones por las nubes», expresaba con un brillo intenso en los ojos Cristina. Algo que comparte el 90 por ciento de los participantes que calificó como excelente o muy buena esta iniciativa, mientras que el resto lo hizo como buena. Nadie salió decepcionado.
Tuesday, 08 November 2022 09:39
Bailar es soñar con los pies
Categorías: Opinión
Etiquetas: terapias , tnfs , danzaterapia , baile
ANA LUZ DE ANDRÉS TERÁNDANZA TERAPEUTA DEL CRE DE ALZHEIMER El perfume mágico de la Danza Creativa Terapéutica no tiene que ver con el objetivo estético del movimiento y sí con el juego dancístico de las imágenes plasmadas con el cuerpo que nos hablan y nos llevan a un paseo por el entendimiento. Situados ante la danza, asistimos como observadores a unos instantes de esas vidas olvidadas, existencias virtuales, que durante unos momentos permiten que su cuerpo y mente se liberen del destino al que han sido arrojadas. Convertidos ahora en bailarines, sus cuerpos se rebelan ante la condena del tiempo para invitarnos a escuchar en secreto el diálogo de su más íntimo yo. En su danza encontramos en potencia el insondable sentido del hombre que, silencioso en el lugar que la vida le ha adjudicado, se pasa todo el día hablando. Mientras bailamos todo se halla momentáneamente en suspenso. Así, gozamos de un espacio y tiempo libres para sorprendernos con cualidades y perfiles suyos que ignoramos, ofreciéndonos un juego de percepción poética que requiere una colaboración activa del observador. Por su creatividad frente al movimiento imaginamos cuántas vidas diferentes le pueden aguardar aún. Todos estos mundos son mundos improbables pero no imposibles: ahí están ante nosotros para demostrarnos su realidad. Quizá esto es lo que hace que al dibujar el aire con su cuerpo pueble su existencia, durante un breve instante, de una belleza exquisita. Belleza desgarradora de no ser cotidianamente todo lo que son. De haber hecho en el olvido otras existencias posibles. Justo de algunas de esas vivencias tenemos noticias gracias a la expresión emocional de un cuerpo sensible.
Tuesday, 08 November 2022 17:47
Etiquetas
Thursday, 17 November 2022 18:15
- alzheimer
- alzhéimer
- atención
- consejos
- cuidador
- cuidadores
- cuidados
- demencia
- demencias
- diagnóstico
- documentación
- ejercicios
- ejercicios estimulación
- ejercicios online
- enfermedad
- estimulación
- estimulación cognitiva
- familia
- fisioterapia
- infografía
- intervención
- investigación
- lectura
- lecturas
- lenguaje
- libro
- libros
- memoria
- psicología
- terapia
Visítanos
Entradas recientes
Monday, 26 September 2022 16:32